Las rebajas de verano que corresponden a la españolas de invierno (por periodo) se caracterizan por la misma locura compradora en tiempos de prosperidad en nuestro país y por una política arrolladora de ofertas. Igual que en España y el resto de Europa. Pero hay un hecho diferencial a simple vista: el escaparate de la tienda queda vacío y cubierto por carteles, haciendo de la superficie de la fachada un completo anuncio. Los hay más y menos elegantes.
Unas imágenes que ilustran el comentario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario